Mueren electrocutados al menos 28 obreros de un taller textil clandestino en Tánger

El taller se encontraba en un subsuelo en el que trabajaban 40 personas. La mayoría de las víctimas son mujeres

Al menos 28 personas han muerto este lunes por la mañana en un taller de confección clandestino en Tánger, según informaron varios medios locales en Marruecos. La fábrica ilegal, situada en un subsuelo y en la que trabajaban 40 personas, quedó inundada tras las lluvias torrenciales de la madrugada del lunes. Al no contar con las condiciones exigidas las víctimas fallecieron electrocutadas. Una decena de víctimas fueron socorridas, según informó el sitio digital Le360que cifraba en, al menos, 17 el número de mujeres fallecidas. Las autoridades han abierto una investigación para aclarar las causas del accidente.

El local, que se encuentra en el barrio de Branes II, cerca del centro de la ciudad, no cumplía con los requisitos de seguridad exigidos por las autoridades, según destacan varios medios locales. Las intensas lluvias caídas en toda la región del norte de Marruecos provocaron inundaciones en los barrios bajos de la urbe y en algunas calles el agua incluso superaba las ventanillas de los coches. Una situación que complicó presumiblemente la situación en el sótano.

El sector textil es la primera fuente de empleo del país, con más de 190.000 puestos de trabajo en su haber. Muchos talleres de confección legalmente establecidos en Marruecos, donde trabajan a menudo muchas personas en pequeños espacios, se han visto obligados a implantar medidas de distancia social, lo que encarece la producción. La baja demanda de pedidos procedentes de España y Francia –principales clientes de Marruecos– y las medidas sanitarias exigidas han llevado a algunos empresarios a echar el cierre.

Qué sabemos del vídeo en el que algunos menores con aspecto indio fabrican mascarillas en condiciones insalubres

Es uno de los vídeos que más hemos visto a lo largo de toda la pandemia, y ha vuelto a llegar al número de Whatsapp de Verifica RTVE. Muestra a un grupo de siete personas con rasgos indios, entre ellos algunos menores, fabricando mascarillas en unas condiciones insalubres. En esta ocasión se trata de una captura de una cuenta de Twitter en la que el vídeo se presenta así: “Gobiernos arrodillados al globalismo dicen que el uso de tapabocas debe ser obligatorio! ¿Quieren ver cómo son hechos los bozales que se ponen a diario?”

Continue reading “Qué sabemos del vídeo en el que algunos menores con aspecto indio fabrican mascarillas en condiciones insalubres”

Dana Thomas, la hora del cambio

Solo uno de la docena de datos más recurrentes en las informaciones sobre negocio textil y crisis climática tiene consenso científico. El resto es pura especu­lación, “intuiciones, enlaces perdidos, marketing y algo que alguien dijo en 2003”, denunciaba el pasado enero la periodista y ecoactivista estadounidense Alden Wicker. “Una organización publica una estadística, otras cuatro la recogen en sus informes y así sucesivamente, hasta que llega un punto en que nadie recuerda o tiene en cuenta la fuente original. De esta manera funcionan las cosas para la moda en el espacio de la sostenibilidad”, expone la fundadora de la plataforma digital EcoCult. Las implicaciones de semejante revelación no son pocas, empezando por el escaso significado de las acciones que puedan emprender marcas y diseñadores en sus intentos por reducir la huella medioambiental de su trabajo y terminando por la imposibilidad de establecer una auténtica regulación para el sector. Por no hablar de la imagen que proyectan los implicados cacareando datos sin contrastar, que oscilan en un baile de números según se acuda al Foro Económico Mundial, la Organización Internacional del Trabajo, la iniciativa Clean Clothes o las consultoras globales de turno. Resultado: intoxicados de desinformación a estas alturas de tamaña película de catástrofes.

Continue reading “Dana Thomas, la hora del cambio”